blog

¿Estás seguro que sabés medir la Frecuencia Cardíaca?

Lic. Juan Manuel Renda
Profesor titular de la Cátedra de Entrenamiento Escuelas N.E.F.


La Frecuencia Cardiaca (FC) ha sido siempre uno de los métodos más utilizados y prácticos para medir la intensidad durante un esfuerzo físico y su uso en la dosificación de las cargas de entrenamiento es innegable pero muchas veces se suelen repetir metodologías de trabajo sin tener realmente una justificación concreta que lo asevere. Una de ellas es la medición de la FC, en donde existen algunos mitos muy arraigados y desconocidos por parte de quienes la utilizamos como parámetro para los planes de actividad física.

A continuación les propongo hacer un pantallazo general sobre este tema y reflexionar si realmente sabías medir la FC...

¿Qué Es El Pulso?

Probablemente le suene medio tonta esta pregunta, pero muchas veces la respuesta no es la que piensan. El pulso es el golpe (pulsación) y expansión de las arterias provocada por el paso de la sangre que es bombeada por el corazón. Esto quiere decir que el pulso no es la frecuencia cardíaca, pero por supuesto es una de las maneras que tenemos de medir o cuantificar la FC. Un aspecto importante a tener en cuenta es que para medir el pulso podemos utilizar como recurso la palpitación, o sea, el sentido del tacto y su correspondiente percepción. El pulso puede percibirse al palpar el impulso (pulsación) en aquellas arterias situadas cerca de la piel. A partir de este concepto vamos a encontrar cosas interesantes en los siguientes puntos...

El Pulgar... ¿Tiene Pulso Propio?

He aquí un tema más que interesante: si yo les preguntara con qué dedos se toma el pulso es bastante probable que me respondan “con el pulgar no...” como si este pobre dedo se tratara de un anticristo o algo por el estilo. Aún así, esto no es lo más interesante... la cereza del postre llega cuando se busca la justificación de dicha frase célebre. El 99% de la gente tiende a decir (muy segura de sí misma): “porque el pulgar tiene pulso propio...” ¿lo escucharon decir?, supongo que si (lamentablemente). Ahora bien, yo me pregunto... el resto de los dedos, ¿no tienen su propio pulso? ¿Acaso no tienen una arteria propia que los nutre constantemente para que los tejidos que los constituyen no mueran? Espero que la respuesta sea positiva ya que de otra manera lo más probable es que se te caiga el dedo (o los dedos) por falta de nutrientes y oxígeno. Entonces... ¿cómo es el asunto? Para explicarlo fácilmente podemos decir que la única manera que cualquier dedo, o cualquier segmento corporal tenga pulso propio es que tenga un corazón propio, o sea, esa persona tendría al menos tres corazones: uno que envía sangre a todo el cuerpo y otro, independiente al anterior, en cada una de las articulaciones de las muñecas que le envían sangre únicamente al pulgar de cada mano. ¿Les parece absurdo? bueno, pero lamento informarles que eso es exactamente lo que proponen quienes dicen: “el pulgar tiene pulso propio”. La razón por la cual no se toma el pulso con el pulgar es que éste tiene la arteria más grande en comparación al resto de los dedos. Recordemos que el pulso se toma a partir de la palpitación y su correspondiente percepción y por esto puede prestarse a confusión para quien lleva a cabo la medición. Otro de los dedos que tampoco se utiliza para la medición del pulso es el meñique, pero ¿por qué? ¿Acaso es un acto de discriminación porque se trata del más chiquito de los dedos? No, en realidad no es por eso. El meñique tampoco se utiliza debido a que es el dedo con menor sensibilidad de la mano y, por esto mismo, también nos costaría llevar a cabo la medición. El pulso se toma, en definitiva, con los dedos Índice, Mayor y Anular.

¿Dónde Tomo El Pulso?

Una vez dilucidado el tema de los dedos, debemos tener en cuenta el lugar en donde podemos medir el pulso. En principio se lo puede medir en cualquier arteria del cuerpo. Asimismo, debemos tener en cuenta que las arterias que se ubican en capas más profundas no van a poder ser posible (ni saludable) acceder a ellas, por lo tanto nos valemos de aquellas arterias que se encuentran cercanas a la piel y, por ende, arterias que son fácilmente palpables. Algunas de estas arterias son las Carótidas, Axilar, Radial, Braquial, Inguinal, Poplítea y Pedia. Ahora bien, todas estas arterias (si bien son palpables) no presentan la misma practicidad a la hora de tomar el pulso durante una actividad física. Tanto en la Arteria Pedia, la Inguinal y la Poplítea se te va a complicar un poco la medición si tu alumno/a esta corriendo, haciendo Sentadillas o saltando, por lo que te recomendaría saltearnos estas ubicaciones. La Arteria Braquial presenta el inconveniente de encontrarse entre masa muscular (entre el Bíceps Braquial y el Braquial Anterior) y no tener un apoyo plano muy cercano, la Axilar no te la recomiendo tampoco si tu alumno/a está muy transpirado. Por lo tanto nos quedarían la Arteria Radial y alguna de las Arterias Carótidas (izquierda o derecha). Ahora nos encontramos en la encrucijada para decidir cuál de estas Arterias es la más beneficiosa para poder medir el pulso sin equivocaciones ni inconvenientes. De esta manera, y siguiendo con la temática de este párrafo, no nos queda otra opción que eliminar; en primera instancia; a las Arterias Carótidas o Pulso Carotídeo, pero... ¿por qué? Bueno, para exponerlo rápidamente y de modo raso tenemos dos justificaciones: la primera de ellas se basa en la posibilidad de desencadenar durante la toma del pulso un reflejo, denominado Reflejo vasovagal del seno carotídeo, que provocará en nuestro alumno/a un apresurado descenso de la frecuencia cardíaca pudiendo provocar mareos o desvanecimiento en el mismo, algo bastante problemático si nuestro alumno/a se encuentra corriendo en una cinta. La segunda justificación está dada por el pulso venoso. Las venas, a diferencia de lo que mucha gente piensa, también tienen pulso, que durante reposo no es muy pronunciado, pero en tanto se lleva a cabo una actividad física aumenta considerablemente pudiendo confundirse o superponiéndose el pulso carotídeo con el correspondiente a las venas yugulares. Por ende, y luego de esta extensa “exclusión” de Arterias, nos quedaron las Arterias Radiales como el punto ideal para la medición del pulso.

¿Y Dónde Meto Los Dedos?

Sabiendo ya que la Artería Radial es el principal lugar donde tomar las pulsaciones tenemos que ver bien en dónde poner los dedos (recuerden: todos los dedos tienen pulso propio eh). Si colocamos el antebrazo en supinación, flexionamos la muñeca y juntamos el pulgar y el meñique, se puede observar que el tendón del músculo Palmar Mayor divide la muñeca en dos partes: externa e interna. La Arteria Radial se puede palpar en la parte externa, en la mitad de la distancia entre el tendón antes citado y el borde externo de la muñeca (en realidad, estaría limitado por el tendón del Supinador Largo, conformando el denominado “Canal del Pulso”). Los dedos no deben colocarse sobre los huesos que conforman el carpo, sino por encima de èstos (dos dedos de distancia aproximadamente del pliegue de flexión).

¿Cuánto Tiempo Se Toma El Pulso?

Una vez clarificado todos los conceptos anteriores nos tocaría saber durante cuánto tiempo debo tomar el pulso. Obviamente, la toma con menor error va a estar determinada por la medición durante un minuto, sin embargo existen atajos que nos permite agilizar la medición y estimar la FC minuto. En este caso podemos tomar las pulsaciones durante 30 segundos y multiplicar el valor obtenido por 2, llevando a cabo una medición un poco más rápida. Otra opción (y la más utilizada probablemente) es contabilizar las pulsaciones en 15 segundos y multiplicar el valor por 4. Si el tiempo apremia, también se pueden tomar las pulsaciones en 6 segundos y al resultado agregarle un “0”. No obstante, no todo es gratis, ya que al tomar un rango menor de tiempo para el control de la FC corremos el riesgo de cometer errores en la estimación. Por ejemplo, si nos tomamos las pulsaciones en treinta segundos, el margen de error es desde +1 hasta -1.

Si nos tomamos las pulsaciones en quince segundos, el margen es desde +4 a -4.
Por último, en el caso de hacerlo en seis segundos, el margen es desde -9 hasta 9. De más está decir que si nos tomamos las pulsaciones en un minuto el margen de error en ese minuto, es de cero.

Por lo tanto, debemos saber que en toma menor a 60 segundos estamos cometiendo errores en la medición a expensas de ganar tiempo (y agilizar la toma). Probablemente por ésto es que el registro en 15 segundos sea tan utilizado ya que se encuentra en una escala intermedia entre el tiempo invertido y el error producido.

Hasta aquí fue una pequeña guía sobre algo que se utiliza constantemente durante las clases, pero que muchas veces, quienes lo utilizan ignoran realmente sus fundamentos, y se basan en preconceptos erróneos existentes en la sociedad, los cuales deberían ser descartados completamente por todo profesional en educación física.

Espero les haya interesado el artículo y puedan sacar provecho de él.

Ahora bien, una última pregunta... (y busco con ella una respuesta sincera), vos ¿realmente sabías medir la Frecuencia Cardíaca?
contacto
Escribime
direccionformativa@gmail.com
WP: +54911.5742.6156
seguime en
director  de